El Coloso de Rodas en Grecia

Una vez más una de las Siete Maravillas del Mundo Antiguo está conformada por una enorme estatua que rinde homenaja a un Dios.
Si bien hoy por hoy no hay pistas concretas sobre el Coloso de Rodas, esta estatua ha quedado en la memoria colectiva del pueblo griego por ser una enorme estatua diseñada con placas de bronce sobre un armazón de hierro que rendía homenaje a Helios, el dios del sol.
Con dimensiones similares a la Estatua de la Libertad –unos 32 metros de altura- este monumento pesaba cerca de 70 toneladas y fue emplazado en la isla de Rodas en el siglo III a. C por el escultor Cares de Lindos.
Los datos acerca de esta obra artística escasean y es por eso que la información que hoy tenemos proviene de algunos escritores antiguos así como de ciertas crónicas bizantinas. Así es como si bien durante muchos años se creyó que la estatua había sido erigida con una pierna apoyada en cada parte del muelle de Rodas (así aparece en algunas imágenes) lo cierto es que no hay pruebas de ello y, lo que es más importante, según parece esta información no es veraz dado que se hubiera hundido por su propio peso. Otra razón para este argumento es que para su construcción deberían haber cerrado un muelle de gran importancia militar durante aquéllos años, algo improbable dados los sucesivos ataques por mar.
Estas razones llevan a pensar que la estatua se encontraba cerca del muelle, donde ahora se encuentra la fortaleza de San Nicolás.
Una noticia de último momento indica que el actual alcalde de Rodas ha encargado a un artista alemán la reconstrucción de la estatua en su ubicación antigua aunque quien sabe si algún día esta información se convertirá en una realidad.